Hace tiempo que nos hemos acostumbrado al suministro de electricidad, lo damos por sentado y no podemos imaginar nuestra existencia sin él. Y ni siquiera tenemos que imaginar nuestra existencia sin electricidad. Vayamos donde vayamos, hay electricidad. Y donde hay electricidad, hay, por supuesto, diversos aparatos eléctricos. Sin ellos, la electricidad no tendría sentido para nosotros. A veces necesitamos electricidad y podemos utilizarla sin problemas. Basta con apretar el interruptor. ¿Qué tiene eso de complicado? Pero la electricidad ha sido fuente de controversia durante mucho tiempo. Sobre todo por su coste. Seguro que usted también se ha dado cuenta.
Muchos estamos molestos por el aumento de los precios. Y la tensión no ha disminuido mucho ni siquiera después de que los políticos al menos pusieran un tope al precio. Porque es caro. Nos quejamos, por ejemplo, de que los proveedores de electricidad se llenen los bolsillos, maldecimos la práctica de exportar nuestra electricidad a la rica Alemania y revenderla allí a un alto precio a través de la bolsa, no nos gusta que el precio se calcule en función de las centrales de gas más caras y que se restrinja el uso de combustibles fósiles.
En resumen, nos gustaría tener electricidad más barata. Y no hace tanto tiempo que las emociones alcanzaron su punto álgido cuando la gente se preocupaba por si podría pagar el aumento de los precios, si podría pagar los depósitos con los nuevos proveedores que tenía que encontrar para sustituir a los que estaban en quiebra, si podría permitirse calentar sus casas y no morirse de frío.
Ahora las pasiones se han calmado un poco, pero la situación sigue sin ser buena. Mucha gente sigue sin poder permitirse el aumento de los costes. Y debido a la carestía generalizada, el precio de la electricidad también juega un papel importante en nuestros presupuestos. Y el Estado está contribuyendo con mucha gente para que funcione, yesperemos que así sea. No podríamos prescindir de la electricidad. ¿O te imaginas volver a encender velas o dormir con gallinas, volver a la calefacción de leña y a cocinar en la estufa? Supongo que no.
